ACTUALIZACIÓN  TEMPORADA  2014-2015:

Para esta próxima temporada 2014-2015, el Elan Race GSX Fusion no ha cambiado mucho. El molde es el mismo y las tecnologías también: perfil Amphibio, Powerspine, RST Sidewall, núcleo de madera laminado y una doble capa de titanal añadida.

Elan Race GSX Fusion 2014-2015
© Elan d.o.o.

Los cambios en el Elan Race GSX Fusion de 2014-2015 se han realizado en el apartado estético. Hay menos verde en la mezcla (en la temporada pasada criticamos su exceso) y el blanco ha ganado protagonismo. Se ve un esquí más moderno, aunque la composición sigue siendo la misma. La apariencia es siempre algo muy subjetivo, pero seguramente muchos estarán de acuerdo en que la renovación es afortunada.

En cuanto a su funcionamiento en nieve, todo lo explicado en el siguiente artículo de la temporada anterior se mantiene plenamente vigente para esta próxima temporada. Aquí tenéis el Test / Review completo…

El Elan Raxe GSX Fusion se encuentra dentro de la gama Race de calle (no-FIS) de Elan. La nomenclatura utilizada nos dice que nos encontramos ante un esquí de Gigante para uso civil (fuera de competición). Si nos ceñimos a lo que dice Elan en su propia web, este esquí debería “ofrecer el máximo rendimiento en todo momento, satisfaciendo a los expertos más exigentes en Eslalon Gigante”. La pregunta clave es entonces: ¿cumple?.

© Elan d.o.o.

No. No cumple ni siquiera por equivocación. Es un esquí que tabletea a alta velocidad (para la que se supone que está construido), haciéndonos reducir la marcha por la sensación de inseguridad que transmite. Si el terreno es irregular, como era el caso en algunos tramos en nuestra prueba, dicho comportamiento sale antes a relucir. En cambio, a velocidades medias y terreno liso es un esquí dócil, cómodo y muy fácil. Esquiarlo al canto es sencillo, puesto que la espátula entra en todas, absolutamente todas las curvas.

En la mano el Elan Race GSX Fusion se nota ligero y dulce. De hecho se notaba el más ligero de los tres probados (GSX, SLX, Waveflex14). La flexión del esquí, en el patín, entra dentro de lo que sería una flexión media o incluso algo blanda. La cola, en cambio, sí se nota dura, aunque no en exceso. Por contra, la espátula es blanda. Blandísima. Esta combinación hace que este esquí sea extraño y pueda calificarse de “desconjuntado”. Tanto que no sólo se nota en la mano, también en el pie. La punta del esquí se nota muy ligera y parece que la cola tire de nosotros hacia abajo.

Es posible que la idea sea buena, pero el resultado obtenido no lo certifica. Que la espátula sea tan blanda nos dejará entrar en todas las curvas. Pero ésta, a partir de cierta velocidad, tabletea. Y si entramos con contundencia en una curva para cerrarla y pisamos el esquí, se nota falso. No hay nada ahí debajo. No nos hará caer, pero nos dirá que no puede. Le hemos vencido.

Llegados aquí, la pregunta es: ¿dónde están las buenas noticias? Aquí mismo. Es un esquí que entra en todas las curvas, al canto o derrapando. Se deja derrapar siempre y no rebota cuando lo hacemos. Es así como mejor funciona. La cola dura nos aporta un apoyo franco y hasta deseable cuando nos quedemos retrasados de posición. En baches lo meteremos donde se nos antoje, hasta resultará algo cómodo. No es cómodo del todo porque esa cola que tanto nos ayuda en pista en los malos momentos, aquí penaliza algo, ya que se mueve un tanto a regañadientes. En curvas cortas podremos derrapar cómodamente y en curvas largas a velocidad media iremos bien siempre y cuando no la rebasemos.

Elan Race GSX Fusion 2013-2014
© Elan d.o.o.

Pero… ¿es un buen esquí? Eso depende del ángulo desde el que lo miremos. Como esquí de Gigante civil, el Elan Race GSX Fusion es malo. Malo con ganas. Como esquí para todo, para pasar cinco horas o seis esquiando sin parar, para surcar algunos baches, para esquiar sin ambición y tener un día redondo y no acabar agotado es un buen esquí.

Especificaciones Técnicas

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